Uno de los principales postulados de unas finanzas personales saludables es gastar menos dinero del que recibimos para poder ahorrar e invertir, ya que esta es una de las mejores formas de construir un patrimonio y aumentar nuestro nivel de riqueza con el tiempo.
La mayoría pensamos que tener este hábito resulta más fácil cuando poseemos un nivel de ingresos elevado, sin embargo, la experiencia demuestra que para muchas de las personas que cuentan con grandes entradas de dinero sigue siendo un reto desarrollar el hábito del ahorro y mantener un nivel de gasto dentro de sus posibilidades.
Este parece ser el caso del presidente de Colombia, Iván Duque Márquez, quién en el año 2020, a pesar de haber tenido ingresos superiores a 570 millones de pesos, vio disminuir su patrimonio líquido debido a su nivel de egresos.
Para proceder con este análisis es importante que tengas presente que el Presidente de la República está obligado a publicar su declaración de renta de acuerdo a la Ley 2013 de 2019 por tener un cargo de elección popular. Esa es la razón por la que en Tributi, la startup que está cambiando la forma en que los colombianos se relacionan con sus finanzas personales y sus impuestos, estamos analizando la declaración de renta de él y de otros personajes públicos influyentes del país. ¿Con qué objetivo? Para que juntos podamos entender cómo es su gestión tributaria y el manejo que cada uno de ellos le da a sus finanzas personales, así que como lo dijimos antes, esta vez analizaremos las finanzas del presidente de Colombia.
Detrimento patrimonial en las finanzas personales de Duque
Una de las fórmulas más básicas en finanzas personales nos dice que el patrimonio líquido de una persona al finalizar un periodo, en este caso un año, es igual a tomar el patrimonio líquido inicial, sumarle todos los ingresos obtenidos y restarle los egresos.
En el caso de Iván Duque encontramos que al finalizar el año 2019 contaba con un patrimonio líquido de 1.480 millones de pesos; en el año 2020 tuvo ingresos por 570 millones de pesos; y al finalizar el año quedó con un patrimonio líquido de 1.434 millones de pesos, es decir, terminó con menos de lo que tenía inicialmente. A esta situación se le conoce como detrimento patrimonial, ya que contrario a las buenas prácticas financieras, el patrimonio en vez de aumentar, disminuye con el tiempo.
A pesar de que el valor de este detrimento no es tan alto, sí llama la atención que Duque tenga un nivel de gastos personales tan elevado. El cargo que él ejerce es de vital importancia para el país y es muy reconocido; por ello, se esperaría que con la remuneración que obtiene por llevarlo a cabo no solo pueda solventar sus gastos y los de su familia, sino que también logre destinar un excedente para el ahorro y la inversión. Por esa razón es sorprendente que en 2020 no haya alcanzado a ahorrar un buen porcentaje de sus ingresos y, peor aún, que ni siquiera haya podido cubrir la totalidad de sus egresos.
¿Cómo se puede explicar que el presidente gaste más de lo que gana?
En primer lugar, notamos que el Presidente realiza un elevado pago de impuestos correspondiente a más del 20% de su ingreso bruto. Este indicador se conoce como tasa efectiva de impuesto y Duque tiene el valor más alto de todos los políticos que hemos analizado hasta el momento.
El valor de su impuesto a cargo se podría disminuir si él aprovechara mejor los beneficios tributarios a los que tiene derecho por ley. Por ejemplo, encontramos que del límite permitido en rentas exentas y deducciones, solamente se toma el 64,76%. Esto quiere decir que aún tiene buen margen para hacer inversiones en herramientas como los fondos de pensiones voluntarias o las cuentas AFC para disminuir su base gravable e impuesto a cargo.
Otra posible explicación a la disminución en su patrimonio es que alguno de sus activos fijos o bienes inmuebles se haya desvalorizado durante el período analizado. Sin embargo, al revisar la ‘Declaración de bienes y rentas y registro de conflictos de interés’ de los años 2019 y 2020 notamos que no hubo tal desvalorización. El mayor cambio de valor entre un año y otro se presenta en una fiducuenta que Duque posee en Colombia, es decir que efectivamente el detrimento patrimonial se dio en dinero en efectivo.
Todo esto indica que probablemente el Presidente tiene un nivel de gasto mensual tan exigente que sus ingresos no son suficientes para cubrirlo. Es importante aclarar que este análisis no busca juzgar la manera en que Duque utiliza su dinero, ya que su declaración de renta y su información pública no nos permite visualizar cómo toma decisiones de gasto e inversión, lo único que podemos hacer es un análisis superficial e identificar un posible problema. Por ejemplo, es probable que no todos sus gastos sean para intereses personales, sino que puedan haber varios relacionados con el bienestar de algunos familiares o terceros.
No es un caso aislado de solo un año
El patrimonio líquido de Iván Duque equivale a 2.5 años de sus ingresos brutos actuales. De acuerdo a su edad y a los ingresos que tiene, este nivel no llega a ser alarmante, pero tampoco es el indicador más sano.
Si asumiéramos que el Presidente ha tenido un nivel de ingresos en aumento progresivo desde el inicio de su carrera, que ha destinado un mínimo del 20% de ellos al ahorro durante sus años productivos (como lo sugiere la regla 50-30-20) y que ha adquirido una rentabilidad mínima de dicho ahorro; Duque podría tener a su edad un patrimonio líquido que equivalga, por lo menos, a 3.8 años de ingresos actuales. Es decir que mínimo debería haber ahorrado 54% más de lo que hoy tiene, durante su carrera productiva.
Nuevamente hacemos la salvedad de que no conocemos la situación puntual de Duque durante todos sus años de vida económica y que pueden existir muchas razones que influyan en una persona para ahorrar menos de lo sugerido en la teoría de finanzas personales. Simplemente encontramos que puede haber una posibilidad de mejora para las finanzas del Presidente, si decidiera ser más constante con el hábito del ahorro y de la inversión.
No le gustan las deudas y tiene un perfil conservador frente al riesgo
Por último, podemos notar que Duque no tiene mucho apetito por productos de crédito ya que sus deudas suman menos del 1% de su patrimonio líquido. Recordemos que tener deudas no necesariamente es algo bueno ni tampoco algo malo. La deuda es una herramienta financiera válida que se puede utilizar para apalancar la ejecución de algún proyecto financiero como la compra de algún activo o la financiación de algún gasto.
Es más, si se usa de forma correcta, tener una deuda puede ser muy valioso para la consecución de objetivos financieros y para mejorar el bienestar. En el caso del Presidente Duque evidenciamos que esta no es de sus favoritas al momento de gestionar sus finanzas personales.
Descarga aquí la declaración de renta de año gravable 2019 de Iván Duque.
Descarga aquí la declaración de renta de año gravable 2020 de Iván Duque.
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